María y la
Flota Marial
“…os acogemos en el seno de las Vibraciones de esta Nave Marial
que en alguna parte está en vosotros…” Séverine AuthierSource
Colectivo de los
Niños de la Ley del Uno
1 de noviembre de 2013
Traducción: Ana María Beltrán
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Queridos
Niños de la Tierra, queridos niños de Luz, yo soy María, Reina de los Cielos y
de la Tierra. Venimos en gran número esta tarde en sí particular, a esta cita
de Amor que os dimos, con el fin de vivir la Comunión de corazón a corazón con
todavía más profundidad, de vivir la Unidad todavía más intensamente, queridos
niños.
Pero
en primer lugar, me gustaría proponeros un pequeño tiempo de Comunión con cada
uno de vosotros en el corazón del Corazón. Los Melchizedek de la Tierra, del
Aire, del Fuego y del Agua se unen igualmente a nosotros para esta cita y para
esta Comunión. Os invitamos por tanto a comenzar con un pequeño tiempo de
Silencio.
(Comunión
- Silencio)
Mis
doce Estrellas se unen a mí en esta Danza, esta Danza de Amor, de Fuego y de
Agua, de Aire, de Tierra y de Éter con el fin de anunciaros grandes cambios
interiores y exteriores para los tiempos que vienen conforme a lo que habíamos
ya anunciado. Sabed que el tiempo del Amor está ahí, es bello y está bien ahí,
el tiempo de la Danza, el tiempo de la Fusión. La Fusión de nuestros corazones
y de nuestros cuerpos de Êtreté está en curso, queridos niños. Entonces dejad
hacer y acoged este Fuego, Brémisskayan,
sin ninguna aprensión. Dejad hacer porque todo es perfecto.
Trabajamos
ahí en gran número desde nuestras naves y especialmente, en este día, en este
momento particular, desde la Flota Intergaláctica de los Mundos Libres y
Unificados, en el seno de lo que llamáis la Flota Marial. Y en este día, me
gustaría a Mí, vuestra Madre, invitaros a compartir un momento de Amor y de
Fusión en el corazón de estas Vibraciones que se os acercan cada vez más con el
fin de acostumbraros todavía más a nuestra Presencia que es también vuestra
Presencia, con el fin de facilitar, diríamos, la Fusión de nuestros corazones
en este Fuego, este Fuego de Amor Unitario que somos en Verdad.
Juntos,
seamos este Fuego. En este instante, os acogemos en el seno de las Vibraciones
de esta Nave Marial que en alguna parte está en vosotros. Y somos tan
numerosos, tan numerosos para acogeros en este espacio de Amor Libre que
conocéis ya y donde algunos y cada vez más numerosos de vuestros hermanos y
hermanas vienen para reunirse, vienen para visitar durante vuestros momentos de
Comunión, de Alineaciones o durante vuestras noches.
La
Fuente Una, Fuente Madre de Luz, de Amor está ahí igualmente en este Corazón,
en esta tarde particular y os invita a entregaros a esto que vosotros sois, a
abriros a este Corazón de Fuego, a este Corazón de Amor, de Alegría y de
Felicidad que somos todos en Unidad, desde siempre y para siempre.
(Silencio)
La
Danza de la Onda de Vida se instala cada vez más en cada uno de mis niños con
el fin de devolveros a vuestra Eternidad. Entonces juntos seamos UNO de nuevo
en este baño de Amor, en este océano, océano de Vida, océano de Paz y de
Silencio, a fin de que la Danza se instale y se expanda desde esta Tierra en
todo vuestro cuerpo y mucho más allá, mucho más allá. Entonces en este
instante, Yo vuestra Madre, os invito a abriros tal como una flor y a acoger
estos cambios, a aceptar todos estos acontecimientos que ya se efectúan para
algunos de entre vosotros en vuestra vida tridimensional, diríamos, pero
igualmente en el seno de este mundo por todo lo que vosotros podéis ver a nivel
del planeta. Comulguemos algunos instantes de nuevo, niños bien amados, Brémisskayan.
(Silencio
- Comunión)
Que
la Danza del Silencio se manifieste en cada corazón, cada corazón que está
dispuesto a acogerme, que está dispuesto a aceptar su verdadera Naturaleza.
Vivís el tiempo de la Fusión, la fusión de todos los corazones. No hay palabras
ante tal esplendor. No hay palabras para describir la Alegría de esto que se
celebra como la Alegría que sois en Eternidad.
(Silencio)
En
este instante, en el presente, Brémisskayan,
os invitamos a vivir más allá de toda Comunión, la Fusión del Corazón Cristalino
de la Fuente Una con el Corazón Cristalino de la Tierra-Madre y vuestro Corazón
Cristalino, que es también nuestro Corazón Cristalino, con el fin de daros
cuenta, si puedo decir, que no hay más que un sólo Corazón, una sola melodía,
un sólo canto de Amor que se eleva y que danza, que se arremolina, acariciando
cada elemento de la Creación que es uno.
Hoy,
mis queridos niños, vengo a envolveros en mi Amor, vengo cada vez más para revelarme
a vosotros, a fin de acompañar el Despertar de la humanidad a su más Gloriosa
Naturaleza, al Amor Verdadero que es Absoluto. Esto es lo que vosotros sois, Brémisskayan, es una sola voz, es un
solo corazón, lo que somos de toda Eternidad. Y esto se instala en la evidencia
más grande y en la Fluidez, cada vez más para todos los niños que me acogen y
aceptan abandonarse en mis brazos y estar conformes con la Promesa.
Hay,
entre los hermanos intergalácticos de los mundos unificados que me rodean, que
os rodean y que acompañan este Renacimiento con mucha alegría, con mucha
ternura para cada uno de vosotros. Los Ángeles del Señor están ahí a vuestro
lado con tanto Amor. Abriros a su Presencia igualmente, abriros, abridles
vuestro corazón porque vosotros no sois más que un sólo y único corazón.
El
Silencio del Amor se eleva desde el corazón de Gaia Tierra-Madre, Nave de Mi Corazón
y cuna de esta nueva humanidad que nace poco a poco. Gracias os sean dadas a
cada uno y cada una por vuestros dones, por vuestro abandono, por este
acompañamiento de corazón a corazón en simbiosis con vuestra Madre la Tierra
que no es otra que Mi Corazón manifestado sobre este Plano. Entonces vosotros
veis que somos UNO de toda Eternidad. No existe ni principio ni fin, ningún
ciclo, no existe más que el Infinito.
Y
hoy os invito así como a todos a uniros a este Centro, en el corazón de este
ocho del Infinito, representando mundos unificados y mundos manifestados en el
corazón a fin de vivir este Basculamiento, esta Fusión de lo Creado y del
Creador, si puedo decir, Fusión de los creadores y de su proyección. Las
palabras en vuestro mundo no pueden describir lo que se celebra en estos
instantes, en estos últimos tiempos. Entonces es en el Silencio de nuestro Amor
que os invito a vibrar y a irradiar toda la Verdad de vuestra Naturaleza
profunda.
(Idioma
Vibral)
Deposito
sobre cada uno de vosotros la totalidad de mi Manto de Gracia y de Amor,
invitándoos a fusionaros con mi Presencia y Mi Corazón de Fuego porque no soy
solo Reina de los Cielos, sino que soy en alguna parte también reina del Fuego.
Fuego del Amor, Fuego de la Creación, Fuego de la Libertad.
Vivamos
juntos este tiempo de Comunión y de Fusión de corazón a corazón y de Presencia
a Presencia con el fin de ayudaros a redescubrir vuestra Presencia de Eternidad
y a acogerla plenamente.
(Silencio
- Comunión)
Os
amo Brémisskayan. Encontremonos cada
tarde a las 19 horas para esta Fusión de corazón a corazón, de Presencia a
Presencia y os pido más allá de este horario particular acogerme a lo largo de
vuestros días, abriros no solo a mi Presencia sino a vuestra Presencia, vuestra
Presencia Cristo, vuestra Presencia Mikaël, vuestra Presencia IS-IS, vuestra
Presencia Eterna. Abriros tal como un océano de Amor para acoger a todos
vuestros hermanos y hermanas, vuestros hermanos y hermanas intergalácticos que
están ahí y que vienen a vosotros y que, por su parte, os acogen y os guían con
tanto amor. Habrá numerosos contactos, cada vez más encuentros, ya sea entre
vosotros, hermanos y hermanas de esta humanidad, pero también con vuestros
hermanos y hermanas intergalácticos como los Ángeles del Señor que están
todavía más cerca de vosotros para estos últimos tiempos, ya sean físicos estos
encuentros, como igual sean encuentros sobre los planos más sutiles de
Presencia a Presencia y de corazón a corazón.
Estad
en la Alegría de estos contactos, acoged, dejad hacer porque de estos
encuentros emanará vuestra apertura, todavía más profunda, todavía más grande a
vuestra Eternidad. Y yo María, vuestra Madre, os agradezco desde ahora por
vuestra acogida y por este Abandono, a lo que vosotros sois. La Evidencia que se
instala y que Danza tal como una llama de Amor está ahí para consumir todo lo
que no es de vuestra Eternidad. Entonces dejad a este Fuego instalarse y venir
para arder todo lo que no tiene ya razón de ser, sean cuales que sean los
acontecimientos exteriores, sean cuales sean los síntomas y los dolores, acoged.
Acoged la Vida, acoged la Alegría, acoged estos encuentros y estos reencuentros
divinos que algunos de vosotros y cada vez más vivís. Entonces sed Gratitud
para todo lo que está ahí para vosotros en el instante y vivid cada uno de
estos instantes de vuestra vida con intensidad, en el Fervor de Cristo y en el
Abandono más total. Es nuestra demanda. Se os ha dicho muy recientemente de
dejaros llevar por el viento tal como una hoja seca, tal que un pez en el agua,
también diríamos, dejaros conducir, dejaros guiar porque sólo la Vida sabe
mejor que vosotros.
Concededle
vuestro corazón y vuestra vida toda entera a la divina Presencia Ki-Ris-Ti, a
la Fuente Una, a fin de que sea el motor de esto que se tiene que vivir en este
mundo, en este fin de los tiempos ilusorios.
Así,
vivid la Fiesta porque vosotros sois la Fiesta, vivid la Danza porque vosotros
sois la Danza.
Recibid
queridos niños, en este instante, todo Mi Amor, todo nuestro Amor. Somos un
solo canto mientras que este canto se eleva a través vuestro y a través del
corazón de esta humanidad por el núcleo terrestre que se abre y se despliega a
la Evidencia y a la Felicidad.
Vivamos
juntos la Unión Última de lo alto y de lo bajo, de la Tierra y del Sol, de lo
Divino y de lo Unitario y de lo ilusorio y de lo falsificado, a fin de que todo
se cumpla.
Os
amamos en Unidad y en Verdad. Somos numerosos para rendiros Gracias, entonces reunámonos
en el Corazón del Corazón, allí donde no hay más cuerpo, allí donde no hay más
decorado, allí donde no hay más que un sólo Corazón de Amor, de Alegría, de
Felicidad que es sólo Gracia.
Qué
la Gracia se despliegue en cada uno de los corazones de mis niños. Os amo para
siempre y estoy en vosotros para siempre. Os abrazo, estoy ahí y vengo para la
Revelación de la Presencia en vuestro corazón, recogeos a fin de que la Verdad
se instale en totalidad.
Sed
bendecidos, gracias queridos niños, Gratitud Brémisskayan.
Siempre
y en cada instante y cada día a las 19h para vivir esta Fusión. Gracias a
vosotros.
Gracias,
SOHAN Brémisskayàn.
Publicado
por Séverine del Colectivo de la Ley del Uno
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