Hola querid@s herman@s
Recién llego a mi casita, después de
pasar
un mes fuera.
Mucha agua
ha pasado bajo
el puente,
en
el Río de la Vida.
Numerosos sucesos en términos
personales, familiares, en el ámbito de las
amistades, de las vivencias y experiencias
.
Es curioso observar que la vida en el
planeta sigue cambiando a cada segundo...
a una velocidad de vértigo... y en un
mismo sentido, no importa en donde
se
esté.
Siempre digo que no debemos
centrarnos
en los problemas, sino
en las soluciones...
y eso hago. Pero es imposible dejar
de ver
el caos alrededor. No se puede
ignorar que
muchos de nuestros
hermanos han
decidido al nivel
del alma, que no desean
despertar en esa vida. Se recusan
a ver
todo lo que pasa por detrás
de las
bambalinas... y no son
capaces de
reconocer lo que tienen
delante de sus
ojos.
Y por más duro que sea, tenemos que
respetar su decisión... y honrarlos
igualmente, recordando siempre
que es la ilusión de viejo que se derrumba,
para abrir espacio al nuevo que llega.
Vuelvo a decir que no hemos venido
a ese
mundo a juzgar, ni a criticar, ni
tampoco a
condenar a nadie. Mucho ya
tenemos con
mantenernos centrados y
conectados con
nuestro corazón.
¡Yo Soy la Presencia,
Ascendida ya!
La LUZ brilla en todo el planeta. La
consciencia del hombre se expande
vertiginosamente. Y todos los que
quieren
, ya pueden ver... ya son
capaces de SER...
Y crear su propia realidad, ahora
de forma
consciente. Lo más importante
ahora
mismo, es la Unidad...
Todos SOMOS UNO.
Estamos en el mismo barco. Y tenemos
que ayudar a los demás a avanzar.
Todos
juntos, a cumplir el plano divino
para la
Tierra.
Bendito seas Su Santisima Santidad, Dios lo bendiga!
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