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domingo, 6 de abril de 2014

Orionis y la Flota Marial






ORIONIS y la Flota Marial
 
“¡Este tiempo del Renacimiento, más allá de todo tiempo, es tal Gracia! Entonces vivid en el corazón de la Danza este despliegue, este Nacimiento que venimos a celebrar con vosotros, en vosotros, en un sólo Corazón fusionándose en el Fuego del Amor, en el Fuego Solar que somos en Verdad.” 
 
Por Séverine AuthierSource, del Colectivo del Uno. 21 de marzo 2014. Con audio.
 


Traducción: Traducción: Ana María Beltrán.

Audio



Hermanos y hermanas en Humanidad, hermanos y hermanas bien amados, yo soy Orionis. Acoged mi Presencia en vuestro corazón desde ahora, mientras que me instalo en vosotros, viniendo a saludaros y para rendiros Gracia, Gracia por vuestro abandono, Gracia por permitir a vuestra Gracia desplegarse en este cuerpo, sobre este mundo.

Hermanos y hermanas, sed agradecidos cada uno, cada una porque por vuestra apertura permitisteis que se instalara, que echara raíces sobre este mundo, en la Madre Tierra con el fin de acompañar a la Humanidad en su Despertar, con el fin de acompañar a vuestra Madre Tierra en su Renacimiento que llega ahí a su cumplimiento.

Estamos ahí muchos alrededor de vosotros para acompañaros, para contemplar el despliegue de la Luz Una sobre este mundo a través de vuestros pasos, gracia a vuestra presencia, gracia a vuestra acogida. Y venimos en este día para Celebrar la revelación de la Verdad en cada uno. Venimos, hermanos y hermanas, para Celebrar el Amor que Sois desde siempre.

¡Este tiempo del Renacimiento, más allá de todo tiempo, es tal Gracia! Entonces vivid en el corazón de la Danza este despliegue, este Nacimiento que venimos a celebrar con vosotros, en vosotros, en un sólo Corazón fusionándose en el Fuego del Amor, en el Fuego Solar que somos en Verdad.

Vengo en Cristo y acompañado de numerosos de vuestros hermanos y hermanas intergalácticos de los Mundos Unificados, para abrazaros, para inundaros de mi gratitud. Es el tiempo ahora, es el tiempo de arraigar en totalidad, de anclar en totalidad en esta tercera dimensión, a través de este cuerpo, el Renacimiento, el Renacimiento hacia la nueva consciencia, hacia la nueva Dimensión de consciencia libre y unificada.

Y es por la Fusión, por la Unión del Cielo y de la Tierra en vosotros, en este cuerpo, que acompañáis este Renacimiento, que permitís este vuelo hacia la nueva consciencia.

Entonces Gracia y Gratitud, recordándoos bien que permanezcáis firmemente establecidos entre vuestros Cuatro Pilares, centrados en la Danza, situados en el corazón de la Evidencia con el fin de que esto sea más dulce y así todo es facilitado, así todo es más fluido. Cuando os colocáis en el Corazón de la Danza, todo el resto no tiene más importancia y nada más puede tocaros, respecto a esta dimensión falsificada, nada más respecto a las preocupaciones y los sufrimientos de este cuerpo, de estas ilusiones.

Entonces rendid Gracia por vuestra regreso a este tiempo de Fiesta que vivís porque es verdaderamente un tiempo de Fiesta, el tiempo donde el tiempo desaparece y donde la fiesta, Fiesta Eterna, reaparece, Fiesta que ha estado siempre presente ahí, justo bajo vuestros ojos si puedo decirlo, y que hoy os es posible ver con más claridad, con más abandono. Y hoy la Evidencia se revela cada vez más a todos. Nada más puede impedir este advenimiento, nada puede parar el Poder del Amor sobre este mundo.

Juntos, más allá de toda dimensión, más allá de toda forma, más allá de toda materia, somos este Fuego de Amor y hoy vengo a ofrecéroslo de nuevo a través de mi Presencia, invitaros así a Fusionar con Quién Soy, con lo que Sois. Es por eso que os invito ahora a unos momentos de silencio con el fin de vivir esta desaparición en vuestra Presencia Unificada a mi Presencia.



(Silencio – Fusión)



Regreso en estos tiempos donde la falsificación y la ilusión no tienen más curso, no tienen más lugar de ser. El Amor estalla como una ola inmensa, una ola inmaculada que viene a llevaros, que viene a llevarse todas vuestras creencias, todas vuestras ilusiones, devolviéndoos a lo que Sois, lo que habéis sido siempre. Entonces dejad venir a vosotros este flujo, este flujo de Eternidad, este flujo de Felicidad porque no es nada más que vuestra propia Naturaleza, es lo que Sois y regreso a recordároslo, regreso a invitaros a entrar en la cadencia, a entrar en la Danza y a dejaros llevar, dejaros desaparecer en esta Felicidad, en este Amor Supremo, más allá de toda creencia, más allá de toda palabra, porque no es nada más que esto, porque nada, nada puede impedirle al Amor reaparecer y emerger en vosotros, a través vuestro, como sobre este mundo.

El Universo se consagra a vosotros, y a ofreceos a vuestra retorno. Consagraos por entero a este Desconocido que viene a daros una cita, que viene a Celebrar vuestra Eternidad, que viene a Celebrar vuestros Esponsales Eternos.

Esto es tan simple, tan simple que es suficiente abandonaros en totalidad, dejar a este Océano llevarse todo lo que creíais que era vuestra realidad. Esto, con el fin de que la Fluidez se instale en vosotros, permitiéndoos disolveros en la Inmaculada Presencia de la Gracia, de la Fuente que abreva todo lo Creado y que viene a invitaros hacia Ella, volveros, con el fin de no ver más que esto, más que la Gracia, más que el Amor, más que la Felicidad sobre este mundo y en cada uno, en cada ser por todas partes a vuestro alrededor.

Aquí viene el tiempo del Retorno de Cristo en vosotros, emergente, sorprendiéndoos para recuperar todo Su Lugar en vosotros, como sobre este mundo. Él viene a abrazaros pero también viene a haceros Danzar, viene a amaros, viene para deciros que no hay nada más, nada más que lo que habéis buscado durante largo tiempo. Entonces dejad de buscar, detened cualquier movimiento innecesario, todo movimiento de la consciencia con el fin de situaros en el Silencio, Silencio que viene a colmarlo todo, Silencio... Plenitud Inmaculada, lejos de todo lo que fue inventado y falsificado.

La Hora ha llegado para la Celebración, para las farándulas de Alegría. Entonces abrid mucho los brazos porque no hay nada más que esto.

Hermanos y hermanas, en compañía de los Melchizedek y de la Flota Marial Intergaláctica, venimos a abrazaros, a agradeceros y a rendiros Gracia.

Os agradezco vuestra acogida.

Hermanos y hermanas en humanidad, soy Orionis y os digo hasta siempre, hasta pronto en el corazón de la Danza.

Gracia.


Transmitido por Séverine AuthierSource, del Colectivo del Uno
Desde el blog de Lucia Montaño

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